viernes

Protagonista de la economía de hoy….mañana que se arregle el que venga.

Dentro de las aristas principales de la gestión del Presidente Kichner se puede ver a la luz (al margen de su notable intención de pasar inadvertido estatizando empresas y hacer que el peronismo desaparezca) en materia económica que sobresale la obsesión por el control diario sobre la economía.
Esto es sin duda una herramienta que motoriza el humor de la población, lo que le permite mostrando números positivos tener espalda para los movimientos electorales mientras se mueva el consumo interno.
Este objetivo de aplicar el control en la economía de hoy pateando para adelante la resolución de las distorsiones que se generan el en camino, representa un buen aire ahora pero con consecuencias evitentes a solucionar a futuro.
De hecho el modelo económico goza de decenas de distorsiones que tendrán en algún momento que normalizarse, y que se potencian en la medida que se continúan aumentando los subsidios (recordemos que estamos en “emergencia económica"). Por ese motivo, a Kirchner le ocupa más las próximas elecciones que las próximas generaciones.

El elegido es… Guillermo Moreno

Será recordado en la era K este personaje que es hoy protagonista destacado en el pulso económico. Ejecuta (de formas cuestionables) que no se mueva el amperímetro de los índices inflacionarios a costa de una intromisión en la actividad privada que es motivo de señales nada positivas ni para inversores externos ni para cualquier empresario local de distinta talla.
Sin duda, uno de los mayores desafíos de nuestro país es aumentar nuestro nivel competitivo para lograr una mayor presencia en los mercados internacionales. La gestión en materia económica hacia el mundo sería con la misión de promover el desarrollo exportador y atraer inversiones y nada ayuda el constante cambio en las reglas de juego. No se ha podido encontrar un equilibrio entre fomentar una política exportadora que no se base sólo en vender al mundo materias primas sino valor agregado, frente a lograr una estabilidad inflacionaria.
Como se anuncia en la idea principal de este blog no es convertirse en un gurú que reparte soluciones, sino una voz que las plantea. Por lo tanto, la forma en que se encara uno de los objetivos principales de K sobre el control diario de los índices inflacionarios, a costa de todo lo que significa Guillermo Moreno, es sin duda un hecho que se enmarca en el contexto de la acumulación de poder de este presidente y su bajo apego al valor de las instituciones. Por ello, es sobresaliente el silencio de la dirigencia empresaria ante la permanente inestabilidad para llevar adelante una actividad privada, en especial aquellas elegidas por el titular del área de Comercio Interior que son franco de constantes intervenciones y cambios. ¿Funcionaría así el modelo K sin un Moreno?

Merece gran cantidad de citas el funcionario Moreno por su revelante protagonismo y será el tiempo el que juzge su gestión, sin duda hoy goza de crédito para hacer lo que quiera y llegar a donde se le antoje. Recientemente el economista de FIEL Abel Viglione respondió a una consulta periodística:
-¿Qué hubiese sucedido si Moreno no actuaba? ¿En que cifra estaría la inflación?
-Al gobierno le da un 9% de inflación….la real es cerca del 12%......y sin toda la “Gestión de Moreno” podemos andar por los 16%.
La pregunta es: ¿Cuál es la mayor consecuencia?… ¿Llevar un 16% o poner trabas al crecimiento a futuro en pos de aprovecharse de la bondad internacional y desperdiciar un momento vital para las transformaciones?

No hay comentarios.: